Después muchos años diseñando y construyendo las casas en Internet de otros, resulta que yo no tengo donde recibir a mis amigos. Después de haber tenido, a lo largo de los años, cientos de conversaciones por correo electrónico sobre los más diversos temas, resulta que no tengo forma de extraer las conclusiones a las que llegamos, o a las que no llegamos.
Para poner remedio a este deseorden, para evitar que sigan acabando en el olvido, o en el mejor de los casos archivadas en alguna carpeta de correo electrónico, las reflexiones, las ideas, las impresiones y las buenas conversaciones, comienzo hoy a construir mi casa en internet.
Después de varios meses postponiendo el comienzo, al fin he conseguido liberar algo de tiempo que espero poder dedicar con cierta asiduidad a este proyecto personal. Espero que después de esta primera piedra de mi casa en Internet, vengan muchas más, porque eso significará que está cumpliendo alguno de los objetivos para los que la comencé a construir.
De todos modos, aunque ya tenga mi propia casa (y es que en Internet son mucho más asequibles), pienso seguir deambulando por las de los demás al ritmo que marquen mi lector de RSS, a menos que un día de estos acabe encontrando el final de internet.
1 comentario:
Boa sorte!
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