Con frecuencia he escrito acerca de la sana envidia que me produce ver cómo la comunidad open data del Reino Unido trabaja para ser un referente a nivel global. El propio Primer Ministro David Cameron está liderando una ambiciosa agenda Open Data con el fin de impulsar la economía digital británica. Con la misma frecuencia he sido muy crítico con el inmovilismo de nuestros líderes políticos en temas de gobierno abierto en general y con la escasa utilidad de las iniciativas open data que se han ido lanzando en España.
Sin embargo algo parece que está cambiando. Esta vez, tengo que decir que estoy muy orgulloso de la Comunidad Open Data española por el liderazgo que está ejerciendo en el apoyo a la campaña por la licencia Open Data única en la Unión Europea. Como sabéis, con motivo de las negociaciones en el Consejo Europeo para la revisión de la Directiva RISP, hace unos días, Andres Nin en su blog, inició una campaña para solicitar que se incluya en dicha directiva un modelo de licencia único para todos los datos públicos que se liberen en la UE. En estos días se han sumado más de 330 apoyos, algunos tan relevantes como el del mismo Patxi López, lehendakari del Gobierno Vasco. Y seguro que se unirán muchos más.
Como sabéis, yo sumé mi apoyo porque creo que una licencia única europea es muy importante para el desarrollo de compañías Open Data como Euroalert.
Sin embargo, durante esta semanas en las que he estado siguiendo la campaña y apoyándola todo lo que he podido he tenido la oportunidad de conocer las reticencias de algunas personas y organizaciones relevantes de la comunidad open data europea. Sobre todo se refieren a discusiones acerca de cuál sería la licencia elegida o a que sería mejor incluir una definición Open Data en lugar de sólo una licencia.
En mi modesta opinión no creo que sea importante en este punto decidir cuál es la licencia más apropiada ya que existen un buen número de licencias que cumplirían perfectamente el propósito.
Sin embargo, durante esta semanas en las que he estado siguiendo la campaña y apoyándola todo lo que he podido he tenido la oportunidad de conocer las reticencias de algunas personas y organizaciones relevantes de la comunidad open data europea. Sobre todo se refieren a discusiones acerca de cuál sería la licencia elegida o a que sería mejor incluir una definición Open Data en lugar de sólo una licencia.
En mi modesta opinión no creo que sea importante en este punto decidir cuál es la licencia más apropiada ya que existen un buen número de licencias que cumplirían perfectamente el propósito.
"Lo realmente importante es que la licencia Open Data sea única en toda la Unión Europea para fortalecer el mercado único"Y me preocupa mucho que este detalle esté haciendo perder fuerza a la campaña. Sería francamente triste que los intereses por imponer una u otra licencia hagan que se pierda esta oportunidad. Apoyemos que se considere incluir una licencia única en la Directiva RISP y después trabajemos para que pueda ser tan sencilla como la licencia que proponía Alberto Ortiz en su blog. Ojalá pudiese ser así de sencilla.